Palabras: 1414 Fecha: 21 de abril, 2020 Sin corrección A tres meses de agosto En la base secreta tan solo se encontraban Mary y Seto. El silencio debido al vacío del lugar se notaba en cada rincón, porque no escuchar las risas de Kano, a Shintarou discutiendo con Takane o Momo conversando animadamente con un retraído Hibiya provocaba un poco de incomodidad. Ese absoluto silencio esparcía por toda la residencia una calma inquietante, ni un ruido, ni un solo movimiento. Muchas veces, bajo ese contexto, la medusa de blancas hebras se preguntó mentalmente si volverían sanos sus amigos a la base. Seto tocó suavemente la puerta, interrumpiendo el llanto de quién estaba dentro, había durado ya casi un minuto, por lo que decidió que era momento de intervenir. — ¿Seto? — Una voz quebradiza se escuchó, dando nuevamente paso al silencio, que se sentía pesado sobre sus hombros. El chico notó que su corazón tamboreaba fuertemente contra su pecho, casi doloroso, nunca se acostumbraría ...
Comentarios
Publicar un comentario